Aunque se considera uno de los monitores técnicos de anestesia más útiles, quizá no todas las clínicas pueden disponer de uno. Esto no significa que no pueda usar los v-gel® advanced.
En la colocación inicial, es esencial estar seguro de que el v-gel® advanced está bien colocado, sellando correctamente la vía aérea (sin fugas). Esto se puede hacer de manera muy simple, sin necesidad de herramientas costosas:
Esta última técnica es muy útil para comprobar que no hay fuga de gas y que la presión de sellado es suficiente si se requiere ventilación asistida.
Mientras el tórax está elevado, contenga la respiración del paciente durante unos segundos. Observar cualquier caída incontrolada o escuchar si hay fugas con un estetoscopio contra la faringe. Si hay fugas y no se puede mantener el tórax “hinchado”, es necesario volver a evaluar el tamaño y/o la posición del v-gel® advanced antes de iniciar la ventilación manual o mecánica.
El Capnógrafo es, por supuesto, útil para evaluar la ventilación activa del paciente y también para mantener la vía aérea permeable continua en caso de que se mueva al paciente durante la anestesia. Pero esto también se puede completar o confirmar sin necesidad de un capnógrafo. El anestesista siempre debe estar alerta de cualquier problema potencial y una simple respiración con presión positiva realizada regularmente durante el mantenimiento no solo confirmará la correcta colocación, sino que también ayudará, sin darse cuenta, a la ventilación del paciente en caso de que realmente sea necesario.